Este es uno de los libros de los que me esperaba bien poco, y me ha sorprendido en el buen sentido.
La protagonista de esta historia es una adolescente extremadamente tímida y llena de inseguridades, lo que le dificulta tener amigos. Hasta que de forma fortuita conoce a Sloane y se convierte en su mejor y única amiga. El cariño que se tienen es recíproco, pero dado el carácter de Emily se crea una relación de dependencia un poco insana, en tanto que la protagonista no es capaz de salir, relacionarse, vestirse... si no está su mejor amiga para apoyarla y asesorarla. Y el problema llega cuando Sloane, de buenas a primeras, desaparece sin dar ningún tipo de explicación, y tan sólo le deja una carta: una lista de cosas que debería hacer.
Así, Emily emprende, sin saberlo, un viaje hacia la madurez cuando decide cumplir la lista que le dejó su mejor amiga, convirtiendo el libro en una historia de aprendizaje y de autoconocimiento. Por eso hay éxitos y fracasos, ganancias y pérdidas, amor, realidades y apariencias... Y Emily se iniciará, sobre todo, en el conocimiento de la amistad. Su viaje supondrá para ella todo un estudio acerca del tema: las amistades falsas, las leales y auténticas, las que se pierden y las que perduran.
En definitiva, un libro lleno de momentos especiales, trágicos unos, divertidos y mágicos otros, con los que la protagonista aprenderá a superar sus miedos e inseguridades, haciendo de esta lectura una historia inolvidable que os va a encantar.
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