jueves, 1 de febrero de 2018

Bajo el cielo eterno de Veronica Rossi



La escritora brasileña Veronica Rossi nos propone en esta trilogía una aventura en la que se mezcla el romance con la ciencia ficción. Ve el futuro como un lugar apocalíptico, en el que, tras una explosión solar, el cielo ha quedado cubierto de éter. El éter hace inviable la vida humana en la tierra, y los hombres que la habitan pasan muchas penalidades para subsistir.
Aria, su protagonista femenina, es una joven "residente", es decir, vive en la cápsula, un lugar muy avanzado tecnológicamente. Los residentes poseen un instrumento que se colocan en el ojo ("smarteye") y gracias a él, además de tener unas excelentes comunicaciones, pueden vivir cualquier realidad virtual que piensen o imaginen.
La madre de Aria ha desaparecido, y la chica se ve envuelta en un conflicto provocado por Soren (el hijo del gobernador de la cápsula) mientras la busca. Hess, padre de Soren, decide expulsarla al exterior para proteger a su hijo.
Aria cree que va a morir, pues lo que se dice del exterior es que son tierras inhóspitas habitadas por hombres inhumanos, caníbales... Sin embargo conoce a Perry, y su suerte cambia.
Perry es el hermano del jefe de su tribu, los mareas. Está convencido de que las tormentas de éter van a ir a peor y trata de hacer ver a su hermano que hay que trasladar la tribu a otro lugar más seguro. Esto hace que discutan públicamente y se haga evidente la rivalidad que hay entre ellos. Este enfrentamiento se acrecenta cuando Perry y su sobrino, Garra, son asaltados por los residentes que están buscando el smarteye de Aria. Intentan matar a Perry y secuestran a su sobrino.
Mientras Perry decide rescatar a Garra se topa con Aria. Y a partir de entonces harán el camino juntos y se convierten en aliados inesperados.
Teniendo en cuenta que hay libros juveniles de ciencia ficción que son ciertamente interesantes (Parciales, Razorland...), en este caso he de decir que se ha quedado coja en bastantes aspectos: en primer lugar le falta originalidad, pues está plagada de tópicos del género (los personajes que son, a priori, enemigos, y acaban ayudándose mutuamente, iniciando un peregrinaje que les lleva de una aventura a otra, y al final a luchar contra los adversarios comunes...) y adolece de falta de profundidad en la reflexión moral que subyace en la ciencia ficción, aspecto que quizá mejora un poco en el tercer libro.
Con todo y con eso, es una historia entretenida, de lectura rápida y sencilla, que ha enganchado a los amantes de la ciencia ficción y del romance juvenil. De hecho, de la primera de las novelas tengo entendido que ya hay película rodada.

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